Bocadillos de plátano maduro


Los bocadillos de plátano son una insignia de la dulcería criolla. Se hacen con plátanos muy maduros y azúcar. Es común encontrarlos en los abastos, panaderías y kioskos envueltos en su propia hoja. Son un bocado muy popular en Venezuela, junto con los bocadillos de guayaba.

Ingredientes
  • 10 plátanos maduros 8 con la concha negra
  • 2 k de azúcar
  • 1 cucharadita de vainilla
  • Jugo de limón


Preparación

Sancochar los plátanos, cortados a la mitad, en abundante agua hasta que se ablanden. Retirar una vez listos y pelar. Triturar el plátano hasta volverlo un puré. Añadir el azúcar, y puestos en el fuego, remover fuertemente con una cuchara de madera. Cuando esté espesa la mezcla, verter el jugo de limón y un chorrito de la vainilla. Seguir removiendo hasta que se vea el fondo de la olla.

Retirar la preparación del fuego y dejar reposar, vacíela en un platón o bandeja engrasado. Cortar los bocadillos en forma rectangular, una vez que se haya enfriado. Espolvorear con azúcar y dejar secar.

FUENTE: http://cocinayvino.net

¿Por qué orar a Dios?


¿Por qué orar?

¿Para qué orar, si Dios ya tiene el perfecto control sobre todas las cosas? ¿Por qué orar, cuando Dios ya sabe lo que le pediremos antes de hacerlo?

(1) La oración es una forma de servir a Dios (Lucas 2:36-38). Oramos porque Dios nos manda que lo hagamos (Filipenses 4:6-7).

(2) El orar es un ejemplo dado a nosotros por Cristo y la iglesia primitiva (Marcos 1:35; Hechos 1:14; 2:42; 3:1; 4:23-31; 6:4; 13:1-3).

(3) Dios decidió que la oración sea el medio para obtener Su intervención en determinadas situaciones:

a) Preparación para decisiones importantes (Lucas 6:12-13).
b) Para derrotar la actividad demoníaca en la vida de las personas (Mateo 17:14-21).
c) En la reunión de los obreros para la cosecha espiritual (Lucas 10:2).
d) Para adquirir fortaleza y vencer ante la tentación (Mateo 26:41).
e) El medio para fortalecer a otros espiritualmente (Efesios 6:18-19).

(4) Tenemos la promesa de Dios de que nuestras oraciones no son en vano, aún si no recibimos específicamente lo que pedimos (Mateo 6:6; Romanos 8:26-27).

(5) Él ha prometido que cuando oremos por cosas que estén de acuerdo a Su voluntad, Él nos las concederá (I Juan 5:14-15).

Algunas veces Él retarda sus respuestas, de acuerdo a Su voluntad y para nuestro beneficio. En estas situaciones, debemos ser diligentes y perseverantes en la oración (Mateo 7:7; Lucas 18:1-8) La oración no debe ser vista como el medio por el cual Dios cumple nuestra voluntad en la tierra, sino como el medio para hacer que la voluntad de Dios sea hecha en la tierra. La sabiduría de Dios excede sin medida a la nuestra.


En situaciones en las que no sabemos específicamente cuál sea la voluntad de Dios, la oración es el medio para discernirla. Si Pedro no le hubiera pedido a Jesús que le ordenara salir de la barca y caminar sobre el agua, él se hubiera perdido de esa experiencia (Mateo 14:28-29). Si la mujer sirofenisa cuya hija estaba poseída por un demonio, no le hubiera rogado a Cristo, su hija no había sido sanada (Marcos 7:26-30). Si el hombre ciego que mendigaba en las afueras de Jericó no hubiera llamado a Cristo, nunca habría recobrado la vista (Lucas 18:35-43). Dios ha dicho que muchas veces no obtenemos lo que pedimos, porque no sabemos cómo pedir (Santiago 4:2). En un sentido, la oración es como compartir el Evangelio con la gente. No sabemos quién responderá al mensaje del Evangelio, hasta que lo compartimos. Es lo mismo con la oración; nunca veremos los resultados de la respuesta a la oración hasta que oremos.

La falta de oración demuestra falta de fe, y falta de confianza en la Palabra de Dios. Oramos para demostrar nuestra fe en Dios, que Él hará conforme a lo que ha prometido en Su Palabra, y bendecirá nuestras vidas abundantemente, más de lo que pudiéramos esperar (Efesios 3:20). La oración es nuestro principal medio para ver la obra de Dios en la vida de otros. Y siendo el medio por el que nos “conectamos” al poder de Dios, es nuestro medio para defendernos del enemigo y su armada (Satanás y su ejército) ante al cual estamos indefensos para derrotarlo por nosotros mismos. Por eso, que Dios nos encuentre con frecuencia ante Su trono, porque tenemos un Sumo Sacerdote en el cielo, que puede identificarse con todo por lo que atravesamos (Hebreos 4:15-16). Tenemos Su promesa de que la oración ferviente del hombre justo puede lograr mucho (Santiago 5:16-18). Que el nombre de Dios sea glorificado en nuestras vidas, creyendo en Él tanto como para acudir con frecuencia ante Él en oración.

¿Cómo puedo hacer que Dios responda a mis oraciones?

Mucha gente ve una “oración contestada” cuando Dios accede a una petición de oración ofrecida a Él. Si la petición de oración no es concedida, con frecuencia es entendido como una oración no contestada. Sin embargo, esto es una comprensión incorrecta de la oración. Dios responde a cada oración que es elevada hacia Él. Lo que debemos recordar es que algunas veces Dios responde “no” o “espera” Dios sólo promete concedernos nuestras oraciones cuando le pedimos de acuerdo a Su voluntad. 1 Juan 5:14-15 nos dice; “Y esta es la confianza que tenemos en Él, que si pedimos alguna cosa conforme a Su voluntad, Él nos oye. Y si sabemos que Él nos oye en cualquiera cosa que pidamos, sabemos que tenemos las peticiones que le hayamos hecho.”

¿Qué significa pedir de acuerdo a Su voluntad? Orar de acuerdo a la voluntad de Dios es orar por cosas que traerán honra y gloria a Dios y/o orar por cosas que la Biblia revela claramente que es la voluntad de Dios que las obtengamos. Si oramos por algo que no es para honrar a Dios, o que no es la voluntad de Dios para nuestras vidas, Dios no nos dará lo que le pedimos. ¿Cómo sabemos cuál es la voluntad de Dios? Dios promete que nos dará sabiduría cuando se la pidamos. Santiago 1:5 dice; “Y si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría, pídala a Dios, el cual da a todos abundantemente y sin reproche, y le será dada.” Familiarízate con lo que dice la Biblia acerca de la voluntad de Dios para tu vida. Entre más entendamos la Palabra de Dios, mejor sabremos por lo que debemos orar. Entre más sepamos por lo que debemos orar, nuestra vida de oración será más efectiva.


 ¿Es aceptable el orar repetidamente por la misma cosa, o sólo debemos pedirla una vez?

Lucas 18:1-7 dice, “También les refirió Jesús una parábola sobre la necesidad de orar siempre, y no desmayar, diciendo. Había en una ciudad un juez, que ni temía a Dios, ni respetaba a hombre. Había también en aquella ciudad una viuda, la cual venía a él, diciendo; hazme justicia de mi adversario. Y él no quiso por algún tiempo; pero después de esto dijo dentro de sí: Aunque ni temo a Dios, ni tengo respeto a hombre, sin embargo, porque esta viuda me es molesta, le haré justicia, no sea que viniendo de continuo, me agote la paciencia. Y dijo el Señor: Oíd lo que dijo el juez injusto. ¿Y acaso Dios no hará justicia a sus escogidos, que claman a Él día y noche? ¿Se tardará en responderles?”

Lucas 11:5-13 declara, “Les dijo también: ¿Quién de vosotros que tenga un amigo, va a él a la medianoche y le dice: Amigo, préstame tres panes, porque un amigo mío ha venido a mí de viaje, y no tengo qué ponerle delante; y aquél, respondiendo desde adentro, le dice: No me molestes; la puerta ya está cerrada, y mis niños están conmigo en cama; no puedo levantarme, y dártelos? Os digo, que aunque no se levante a dárselos por ser su amigo, sin embargo por su importunidad se levantará y le dará todo lo que necesite. Y yo os digo; Pedid, y se os dará; buscad, y hallaréis; llamad, y se os abrirá. Porque todo aquel que pide, recibe; y el que busca, halla; y al que llama, se le abrirá. ¿Qué padre de vosotros, si su hijo le pide pan, le dará una piedra? ¿o si pescado, en lugar de pescado, le dará una serpiente? ¿O si le pide un huevo, le dará un escorpión? Pues si vosotros, siendo malos, sabéis dar buenas dádivas a vuestros hijos, ¿Cuánto más vuestro Padre celestial dará el Espíritu Santo a los que se lo pidan?”


Ambos pasajes nos animan a orar – ¡y a seguir orando! No hay nada malo con pedir repetidamente la misma cosa. En tanto esté dentro de la voluntad de Dios (1 Juan 5:14-15), sigue pidiendo hasta que Dios te conceda tu petición o quite el deseo de tu corazón. Algunas veces Dios nos fuerza a esperar la respuesta a nuestras oraciones para enseñarnos paciencia y perseverancia. Algunas veces pedimos por algo que aún no está en el tiempo que Dios ha determinado para nuestras vidas. Otras veces le pedimos algo que no está de acuerdo a Su voluntad para nosotros, y Él nos dice no. La oración no es sólo el presentar nuestras peticiones a Dios, también es Dios presentando Su voluntad a nuestros corazones. Sigue pidiendo, sigue tocando, sigue buscando – hasta que Dios te conceda tus peticiones, o te convenza de que tu petición no es Su voluntad para ti.


FUENTE: gotquestions.org

Sin Ti



Uh la, la, uh
Chino y Nacho (La, la, la, uh)
La, la, la, uh
Yo no quiero nada sin ti
Uh la, la, uh
La, la, la, uh
La, la, la, uh
Yo no quiero nada sin ti

Sin ti
Todo es normal
Esta vida sigue igual
No se derrumba el suelo bajo mis pies
Nada se va poner al revés

Sé que puedo enamorarme de nuevo
Sobrevivir sin tus besos
Y lograr olvidarme de ti
No te confundas con eso
Contigo lo que siento es perfecto
Espero que nunca te separes de mi (eeeh)

Yo sé que sin ti
Ay la vida no detiene su curso
El sol sigue alumbrando este mundo
Yo sin ti puedo seguir respirando
Pero no quiero intentarlo

Sin ti
Igual hay flores de color en el campo
Otras personas que se siguen amando
El planeta se mantiene girando
Pero yo no quiero nada sin ti

Uh la, la, uh
Sin ti
La, la, la, uh
Sin ti (La, la, la, uh)
Yo no quiero nada sin ti (Bis x2)

Mi alegría se transformaría en una melodía de melancolía
Todo el día solo escribiría sobre la agonía de una noche sin tu compañía
Mi habitación la sentiría vacía
Una razón para notarla más fría
Lloraría y no sería feliz
Pero estoy seguro que no me moriría
Te olvidaría con el pasar de los días
Y a pesar de mi teoría nena mía no me arriesgaría a estar sin ti

Sin Ti
Ay la vida no detiene su curso
El sol sigue alumbrando este mundo
Yo sin ti puedo seguir respirando
Pero no quiero intentarlo

Sin ti
Igual hay flores de color en el campo
Otras personas que se siguen amando
El planeta se mantiene girando
Pero yo no quiero nada sin ti

Uh la, la, uh
Sin ti
La, la, la, uh
Sin ti (La, la, la, uh)
Yo no quiero nada sin ti (Bis x2)

Sin ti no quiero nada
Ni noches ni mañanas
Y aunque el mundo no para
Yo no quiero nada sin ti

Sin ti yo veo las estrellas
También mujeres bellas
Y aunque hay muchas de ellas
Yo no quiero nada sin ti

Sin ti
Sin ti
Yo no quiero nada sin ti (Bis x2)

Uh la, la, uh
Tu reconoces un hit cuando lo oyes (La, la, la, uh)
La, la, la
Chino y Nacho (Yo no quiero nada sin ti)

Uh la, la, uh
Daniel y Yein (La, la, la, uh)
La, la, la
Esto es amor supremo (Yo no quiero nada sin ti)

Uh la, la, uh
Sin ti
La, la, la, uh
Sin ti  
Yo no quiero nada sin ti (Bis x2)

Hábitos que destruyen tu cerebro


Según la Organización Mundial de la Salud, estas son las costumbres que más perjudican el cerebro:

  •     No desayunar: Las personas que no desayunan no tienen un nivel óptimo de azúcar y proteínas. Nutrientes que son necesarios, sobre todo en las primeras horas del día, ya que evitan la degeneración del cerebro.


  • Reacciones violentas o estrés: Sabemos que es difícil, pero hay que tratar de evitar cualquier reacción sorpresiva o estrés, porque causan el endurecimiento de las arterias del cerebro; y cuando éstas se fortifican, la capacidad mental disminuye con el tiempo.


  • Fumar: Este mal hábito disminuye la masa encefálica, que es la que se encarga de las funciones voluntarias. Por otro lado, los adictos al tabaco son más propensos a sufrir de Alzheimer.


  • Exceso de azúcar: El alto consumo de azúcar interrumpe la absorción de proteínas. Si el cuerpo no consume de bien los diversos nutrientes, el desarrollo del cerebro se ve interferido por la mala alimentación.


  • Exposición constante a ambientes contaminados: El cerebro es el órgano que más consume oxígeno. Si se está por mucho tiempo en algún lugar contaminado, se disminuirá el suministro de oxígeno al cerebro. Como consecuencia, habría una deficiencia cerebral.


  • Dormir poco: Dormir 8 horas diarias hace que el cerebro pueda descansar. Cuando duermes poco, se acelera la muerte de células cerebrales.


  • Taparte la cabeza mientras duermes: Cuando uno duerme con la cabeza cubierta, aumenta la concentración del dióxido de carbono en el cerebro, ocasionándole efectos dañinos.


  • Forzar el cerebro durante una enfermedad: Trabajar o estudiar mucho cuando estás enferma es súper dañino. A largo plazo provocarás disminución en la eficacia de este órgano. Cuando estás mal de salud, lo más recomendable es descansar.

FUENTE: Publimetro.cl

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...